SUMARIO

La Conferencia de Ginebra significó la independencia de Camboya, Laos y Vietnam de la Unión Francesa. Sin embargo, Vietnam quedó dividida en dos estados por el paralelo 17. En el norte se estableció un régimen de carácter comunista dirigido por Ho Chi Minh y con capital en Hanói. Mientras el sur contaría con un régimen de carácter occidental gobernado por el antiguo emperador Bao Dai y dirigido por el primer ministro Ngo Dình Diem.

Sin embargo, esta debía de ser una situación provisional, ya que en los acuerdos se estableció también la celebración de un referéndum en ambos Vietnam para que el pueblo decidiera bajo qué autoridad y régimen quería vivir.

Sala principal.

Por otra parte, la celebración de la Conferencia de Ginebra significó también la carta de presentación de la China comunista en el escenario internacional. La República Popular China no solamente salió reforzada después de la Conferencia, sino que además aprovechó la ocasión para debilitar, aunque solo ligeramente, a Estados Unidos. Un gran éxito que no se habría conseguido sin la activa participación del mítico primer ministro y ministro de Asuntos Exteriores chino: Zhou Enlai.

ANÁLISIS

China, que buscaba una salida al conflicto entre el Vietminh y Francia, logró mantener durante la Conferencia una serie de contactos diplomáticos con algunos de los países occidentales más destacados y mostrarse como una alternativa comunista respecto a la Unión Soviética, aún considerada entonces por Pekín como un aliado, pero ante la que algunos dirigentes chinos ya mostraban recelos.

Zhou Enlai.

Tal y como hiciera en Corea, la República Popular China respaldó la causa que Ho Chi Minh defendía, proporcionando apoyo logístico y material a Vietnam en su lucha contra las tropas coloniales francesas. Sin embargo, China quiso aparecer como un poder moderado y cauteloso de modo que sus relaciones con las potencias occidentales no se vieran muy afectadas.

La delegación china en Ginebra, encabezada por Zhou Enlai, tenía la misión de evitar que el conflicto en Vietnam terminara por internacionalizarse, como ya ocurrió en Corea. Por un lado, China necesitaba relanzar su recuperación económica, proceso interrumpido por causa de la guerra en Corea, en la que China participó de manera notable.

Por otro lado, Pekín tampoco estaba interesado en que Estados Unidos, que se había erigido como el sucesor del poder colonial francés, aumentará su influencia en Indochina. Aunque por aquel entonces la guerra enfrentaba a Francia y el Vietminh, la realidad era que el peso material de la misma, especialmente en los últimos años, era asumido por Estados Unidos.

A guisa de ejemplo, en 1954 Francia solamente cubría el 21% del coste del conflicto. Este había entrado por completo en la órbita de Washington y por ese motivo los chinos pensaban que en la Conferencia de Ginebra, Estados Unidos solo estaba presente para sabotear la paz.

El líder del Vietminh, Pham Van Dong.

China, junto a Francia y Vietnam, pasó a ser el tercer negociador principal. Aprovechando la delicada situación de Francia, que después de la humillante derrota en Dien Bien Phu buscaba una salida al conflicto, Zhou Enlai vio la oportunidad de alcanzar la paz en Vietnam, por mucho que Estados Unidos no estuviera de acuerdo.

Enlai convenció a la delegación del Vietminh de que la solución del paralelo 17 era la más adecuada y que Ho Chi Minh debía aceptar las condiciones, poniendo punto y final a la guerra. Enlai convenció así al Vietminh. Sin embargo, muchos vietnamitas hubieran deseado la inmediata unificación del país, hecho que tardaría aún varios años en producirse.

CONTACTOS DIPLOMÁTICOS

Las relaciones sino-soviéticas y sino-británicas durante la Conferencia de Ginebra fueron otro de los capítulos de interés dentro del discurrir de ese encuentro diplomático.

La Unión Soviética tenía dos objetivos fundamentales. En primer lugar, conseguir que Francia rechazara el proyecto estadounidense de la Comunidad Europea de Defensa, que incluía rearmar a Alemania Occidental. En segundo lugar, intentar contener a China, vista por Moscú como una neófita en política internacional e incluso como muy imprudente e inexperta, según los calificativos del propio Molotov.

Zhou y Molotov.

Los soviéticos no querían que de la Conferencia naciera el germen de una futura guerra entre China y Estados Unidos. Tal y como afirmó la delegación británica, pese a que su objetivo principal era acercarse a los chinos para alejarlos de la esfera soviética, al final tuvieron que acercarse a los soviéticos para que controlaran a los chinos, vistos tanto por la URSS como por el resto de delegaciones occidentales como muy imprudentes y osados en exceso. De modo que realmente, para Moscú el conflicto de Vietnam era un asunto secundario.

En cuanto a las relaciones entre británicos y chinos, mejoraron sensiblemente ya que hubo varios encuentros entre ambas delegaciones en una atmósfera distendida y cordial, haciendo incluso posibles futuros encuentros entre miembros del Partido Laborista inglés y del Partido Comunista chino.

Los contactos entre China y el Reino Unido tuvieron como corolario una mejora en el comercio bilateral. La mejora de las relaciones fue posible gracias a la voluntad de sus dirigentes y también a que el Reino Unido descartaba, a diferencia de estados Unidos, la teoría del dominó.

Encuentro entre Zhou y Eden.

La posición de Estados Unidos quedó relegada a un segundo plano, puesto que no apoyó los acuerdos que se negociaron y adoptó una actitud muy agresiva contra China. Como anécdota cabe destacar la negación del saludo del Secretario de Estado John Foster Dulles a Zhou Enlai.

CONCLUSIÓN

El análisis principal de la Conferencia de Ginebra es la constatación del importante papel que desempeñó en ella la nueva China comunista, a pesar de ser la primera vez que asistía a una conferencia de tales características. Supuso la carta de presentación de una potencia a la que a partir de entonces, y aún sin la bomba atómica, habría que tener en cuenta en el marco de las relaciones internacionales.

Asimismo, la Conferencia también supuso el auge de la figura de Zhou Enlai, quien adquirió gran prestigio gracias a su activa participación y al modo en como se desenvolvió en el juego de la diplomacia, en especial tratando con potencias europeas como Francia y el Reino Unido.

Zhou y Mendes France.

Como conclusión final, destaco que la actuación de China en la Conferencia, si bien propició un pequeño avance del comunismo, también provocó una actitud más intransigente por parte de los Estados Unidos respecto al comunismo en Asia, sentando las bases del futuro conflicto en Vietnam pocos años después. Un conflicto en el que Estados Unidos acabaría por implicarse plenamente y que, desafortunadamente para Washington, finalizaría con Vietnam convertido en nuevo miembro de la familia de estados comunistas.