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Zhongnanhái: lugar de trabajo y de residencia
Zhongnanhái se divide entre una mitad norte ocupada por el mar Central o Zhonghai y una mitad sur donde se encuentra el mar del Sur o Nanhai, con la bellísima isla Yingtai en su seno. La Puerta de la Nueva China o Xinhuamén da acceso directo al extremo meridional del mar del Sur.
Los edificios del gobierno y las residencias de los más altos cargos del Consejo de Estado, como son el primer ministro y los viceprimeros ministros, se concentran en una amplia zona al oeste de ambos lagos, mientras que los edificios del Comité Permanente del Partido, del Politburó y las residencias de sus líderes se encuentran en la orilla este del mar del Sur.
Distribución de Zhongnanhái: a la izq. los edificios del Gobierno; a la dcha. y el centro los del Partido.
Zhongnanhái es la residencia oficial de Xi Jinping, actual Presidente de la República Popular China y Secretario General del Partido Comunista. En ocasiones, los cargos de Presidente y de Secretario General no son ejercidos por la misma persona al mismo tiempo, por lo que, en tal caso, cada uno de ellos residiría en su correspondiente zona de Zhongnanhái.
Xi Jinping en su despacho presidencial en Zhongnanhái.
En la actualidad, el presidente Xi Jinping ostenta ambos cargos, como también lo hiciera su predecesor Hu Jintao, pero existen ejemplos de presidentes de la República Popular que no fueron Secretarios Generales del PCCh al mismo tiempo y viceversa. A decir verdad, la presidencia de la República es el cargo con menos poder de los tres que puede ejercer a la vez el líder supremo de China.
El ejemplo más emblemático sería el célebre Deng Xiaoping, de quien los medios nos decían, durante las protestas de Tiananmén en junio de 1989, que era el líder de China, mientras que por aquel entonces ya no ejercía ni la presidencia de la República ni la del Partido, pero aún presidía la Comisión Militar Central, el más importante de los tres cargos.
Deng Xiaoping, líder supremo de China durante la década de los 80.
A pesar de que Zhongnanhái es la residencia oficial del presidente Xi Jinping, es de dominio público que cuenta con otra residencia en la Colina del Manantial de Jade, en las afueras al noroeste de Pekín, donde reside no pocos días al año. Los ex presidentes Hu Jintao y Jiang Zemin también repartieron su residencia entre Zhongnanhái y la Colina del Manantial de Jade.
Al pie de la Colina del Manantial de Jade se encuentra otro complejo residencial para los líderes chinos.
A pesar de ocupar una enorme superficie de 3,5 millones de m², Zhongnanhái es un lugar completamente saturado por antiguas edificaciones de madera y otros edificios de ladrillo construidos a partir de 1949.
En la actualidad no queda espacio para nuevas construcciones, al menos horizontalmente, y los órganos de gobierno hace años que se han visto obligados a expandir sus oficinas en edificios fuera del complejo.
No solo las edificaciones de todo tipo forman legión, sino que la cantidad de personas que, de lunes a viernes sobre todo, se concentra en el complejo puede llegar a ser asfixiante, privando al bellísimo ex jardín imperial de la función de lugar de ocio contemplativo que poseía antaño.
La superficie edificada supera con creces a la ajardinada en Zhongnanhái.
Se trata de más de uno o dos millares de personas trabajando en su interior, entre los altos funcionarios del gobierno y del Partido, sus secretarios y ayudantes, el personal de seguridad, de mantenimiento y de limpieza, los incontables chóferes, el personal de los órganos de prensa oficial del gobierno y del Partido, y la lista continúa…
La seguridad en Zhongnanhái (i)
Zhongnanhái es, probablemente, la sede de poder más bien guardada del planeta, aunque oficialmente se desconoce casi todo acerca de sus medidas de seguridad, ya sean activas o pasivas.
No obstante, una parte de la seguridad es visible y, por tanto, comprobable empíricamente, sin necesidad de reconocimiento oficial sobre la misma.
Empecemos por la ya familiar entrada principal al complejo, la Puerta de la Nueva China o Xinhuamén. Frente a ella, pintada en el suelo, se encuentra una gruesa línea de color amarillo que sirve de advertencia a los curiosos que pretendan acercarse demasiado a la entrada. Además, para garantizar que nadie la cruce, detrás de la línea se sitúan media docena o más de policías y agentes de seguridad vestidos de negro.
La Puerta de la Nueva China (Xinhuamén) con su distintiva línea de color amarillo y los agentes de seguridad vestidos de uniforme y de paisano.
Si bien no se permiten visitas a Zhongnanhái, la entrada de Xinhuamén es uno de los polos turísticos de Pekín junto a la plaza de Tiananmén y la Ciudad Prohibida. Ello se debe a que los turistas nacionales adoran posar frente a la entrada al corazón político de su país y a que las diarias ceremonias de izado y arriado de la bandera china en la plaza de Tiananamén, todo un espectáculo de masas debido a su pompa y solemnidad, también se celebran en Xinhuamén pero con mucha menos competencia espacial.
La bandera nacional china frente a la entrada de Xinhuamén.
Otro punto tangible en materia de seguridad es la separación física entre el mar del Norte y Zhongnanhái. Recordemos que el lago septentrional de los tres que componían el jardín imperial Xiyuan, el Beihai, es desde hace un siglo un parque público y que la única separación física con Zhongnanhái es un puente. Entonces, ¿cómo se evita una posible infiltración en el complejo a través del parque Beihai?
El puente que oficia de frontera entre Beihai y Zhongnanhái es un puente en arcos, típico de la arquitetura de los jardines chinos, sean estos imperiales o de menor categoría. Por tanto, la separación no es completa ya que el agua circula del mar del Norte hasta los otros dos estanques que conforman Zhongnanhái a través de los arcos.
Intentar lanzarse desde uno de los arcenes del puente, en este caso el que linda con Zhongnanhái, resulta harto complicado debido a las altas barandas metálicas que lo dificultan sobremanera.
Sin embargo, existe la posibilidad, aunque remota, de que alguien se adentre en el complejo remando, nadando o buceando desde las aguas de Beihai. Para evitarlo, los arcos pueden ser cerrados mediante unas planchas que se sumergen por debajo de la superficie. Casi siempre se mantiene el arco central abierto para permitir que el agua siga fluyendo, aunque en caso de emergencia todos los arcos podrían cerrarse y blindar Zhongnanhái por completo.
Foto tomada desde el mar Central (Zhonghai) donde se aprecian los arcos cerrados en el puente que separa Zhongnanhái del parque Beihai.
Asimismo, en el lado del parque Beihai, antes incluso de llegar a los arcos, hay colocada una barrera de contención de la que cuelga una malla bajo la superficie, lo que representa un primer obstáculo para quien, de manera involuntaria o deliberada, pretenda acercarse a los arcos del puente e intente cruzar a Zhongnanhái.
La barrera de contención en el lado de Beihai.
Para acabar la presentación de las medidas de seguridad físicas y tangibles de Zhongnanhái, no podíamos sino mencionar a la Unidad 61889, el Cuerpo Central de Guardia encargado de la seguridad en las entradas al complejo y de la vigilancia en su interior.
El Cuerpo Central de Guardia de Zhongnanhái en la entrada de Xinhuamén.
El origen de la Unidad 61889, anteriormente llamada Unidad 8341, se remonta a la creación del Regimiento Central de la Guardia del Ejército Popular de Liberación tras la fundación de la República Popular en 1949.
La unidad está dirigida por la Oficina Militar de Cuerpos de Seguridad, que a su vez depende de la Oficina Central de Seguridad del Partido Comunista Chino, el órgano responsable de la seguridad personal de los altos funcionarios del gobierno, de los dirigentes del Partido y de los militares de alto rango de la Comisión Militar Central.
El Cuerpo de Guardia en una de las entradas secundarias a Zhongnanhái.
La Unidad 61889 no solo está compuesta por los guardias vestidos con uniforme de gala emplazados en las entradas de Zhongnanhái, sobre todo en la entrada de Xinhuamén, sino que también pertenecen a ella los guardaespaldas que protegen a los líderes chinos de visita en el extranjero. Esos agentes, hombres y mujeres vestidos de paisano en color negro o azul oscuro, son apodados los ‘guardaespaldas de Zhongnanhái’.
El término se popularizó en China gracias a una película de acción hongkonesa de 1994 protagonizada por el actor y artista marcial Jet Li, cuyo título en inglés es The bodyguard from Beijing, aunque el original en chino contiene el topónimo Zhongnanhái en lugar de Beijing. De hecho, existen no pocas páginas y sitios web donde se hace referencia a la película con el título resultante de la traducción literal del chino al inglés —The bodyguard of Zhongnanhai.
Carátula de DVD del filme El guardaespaldas de Pekín, también titulada El Defensor (1994).
Desde tiempos más recientes, el uso masivo de las redes sociales en China ha convertido a los guardaespaldas de Zhongnanhái en objeto de culto y admiración. Algunos de esos agentes, especialmente los de sexo femenino, gozan de una popularidad solo parangonable con las celebridades de Hollywood.
Algunas agentes femeninas son conocidas incluso por su nombre, como es el caso de Yan Yuexia (严月霞), una guardaespaldas experta en artes marciales que protege muy de cerca a mandatarias extranjeras, reinas consortes y esposas de presidentes y primeros ministros de visita en China. En su país es apodada la ‘guardaespaldas número 1’ y la ‘guardaespaldas más bella de China’.
Aplicaciones chinas como TikTok, WeChat, Weibo, Youku, por nombrar las más conocidas en Occidente, rebosan de vídeos, clips y fotos mostrando a los agentes de la Unidad 61889 acompañando a los líderes chinos en sus visitas al extranjero o a los dignatarios extranjeros de visita oficial en China.
El mito de los guardaespaldas de Zhongnanhái, fruto de una cinta producida y protagonizada por Jet Li más de 30 años atrás, se ha sustantivado en una realidad subjetiva nutrida por la viralidad de las redes sociales y el afán chino por crear ídolos equiparables a los superhéroes de los cómics occidentales, pero de carne y hueso y expertos en kung-fu.
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